Hace unos días un compañero me escribió un correo sugiriendo que escribiera acerca de algunas actitudes de rechazo tomadas por las personas en contra de la tecnología y en la disyuntiva que se encontraban algunos puestos de trabajo ante la inminente automatización a futuro. Al respecto es importante señalar que todo es un proceso que conlleva sus años, pero el consejo en este caso no es ver lo negativo sino mirar hacia adelante pensando en las oportunidades laborales del futuro para nosotros y nuestros hijos. Siempre será importante analizar las tendencias laborales para capacitarnos y seguir vigentes.
El último informe llevado a cabo por Randstad Research, el Centro de estudios de Randstad, revela que la tecnología y la digitalización afectarán a la economía general, a las formas de consumo, y, por lo tanto, al mercado laboral. Dicho mercado está experimentando una gran evolución producto de las nuevas generaciones profesionales (Millenials y la generación Z), lo que lleva a cuestionarnos cuál sería la tendencia en los próximos años hasta 2025.
Los expertos del Centro de estudios Randstad cree que la evolución de cualquier país pasará por generar bienes y servicios de alto valor añadido. El desarrollo económico en América Latina dependerá en gran parte de la capacidad del país de generar conocimientos científicos, tecnológicos e innovadores y de tener un liderazgo empresarial en I+D+i en la región. Estos expertos creen que las cualidades que deberán reunir los trabajadores en 2025 estarán enfocadas a habilidades transversales que compartan todos los perfiles, independientemente de la formación concreta.
Las organizaciones son conscientes que la motivación, la satisfacción y la autorrealización del trabajador son vitales para mantener un buen clima laboral y mejorar la productividad por lo que permitirán a sus empleados conciliar la vida laboral con la personal, se crearán entornos laborales más motivacionales y dirigirán sus políticas a fomentar la confianza entre los colaboradores.
Adecco, líder mundial en la gestión de recursos humanos en colaboración con Opinno, también ha realizado un estudio sobre el futuro del trabajo con el que ofrece una visión en tendencias laborales que surgirán en los próximos años. Cabe destacar la disolución de la tradicional división de economía, que contemplaba el sector primario, el secundario y el terciario. Como consecuencia de la transformación productiva, nuevos sectores comienzan a liderar la creación de empleo, y otros lo harán en los próximos años. Entre ellos, los expertos se enfocan más en el tecnológico y el de I+D+i (Investigación, desarrollo e innovación), sin dejar de lado el sector turismo y ocio, salud y bienestar y en el sector energético.
I+D+i es un nuevo concepto adaptado con el avance tecnológico e investigativo centrados en el avance de la sociedad, siendo una de las partes más importantes dentro de las tecnologías informativas.
En este sentido serán los perfiles cualificados ligados a la tecnología y al ámbito digital, los perfiles vinculados al trato con personas y los especializados en marketing y ventas los que más relevancia alcanzarán en los próximos 7-10 años. Por otra parte; los expertos señalan que esto traerá repercusiones negativas ya que muchos empleos considerados “tradicionales” se estarán viendo impactados por la automatización.
Tendencias sociales que afectan el mercado laboral
La irrupción de las nuevas tecnologías que cada vez tienen ciclos de vida más cortos, la globalización o los cambios demográficos son algunas de las tendencias que afectan a los ámbitos político, económico y social, y por supuesto, también al laboral. Así las cosas; los factores de cambio que se producen fuera del ámbito del trabajo pero que influirán en éste de forma directa en los próximos años serán:
a). Las empresas consideran que las nuevas tecnologías las obligan a reinventarse y, por lo tanto, a reinventar sus formas de trabajo. Por esta razón deberán desarrollar una capacidad de adaptación a nuevos patrones.
b). En materia de relaciones laborales se está globalizando la legislación del mercado de trabajo y se está exportando a los países emergentes los modelos de gestión innovadores, con valores culturales, económicos y empresariales.
c). Otro factor que impactará en un 55% según los expertos, serán los nuevos medios de comunicación y relaciones sociales las cuales se multiplicarán con el tiempo entre las empresas.
El impacto de la tecnología en el trabajo
Definitivamente la tecnología está revolucionando al mundo, y también el mercado laboral. Y viéndolo positivamente en este aspecto se estarían creando mayor porcentaje de nuevos puestos de trabajo producto de las nuevas tecnologías y la entrada de empresas tecnológicas en la región.
Por otro lado; se estarían modificando estándares de trabajo. Ya que los expertos opinan que la colaboración a distancia será la tendencia con mayor impacto esperado en relación con las tecnologías. La transformación tecnológica favorecerá la deslocalización del trabajo y permitirá crear comunidades de aprendizaje colaborativo. No se trata simplemente de uso generalizado del teletrabajo en los casos que sea posible, sino que estos avances permitirían basar una relación laboral en la confianza hacia el trabajador por parte de las empresas como en el rendimiento del mismo.
También; en este sentido adquirirá gran influencia la disponibilidad total de la información en la red, junto con el aumento de las capacidades humanas y la productividad. El reto será lograr el equilibrio de la vida profesional y laboral y la adaptación generacional a los nuevos avances.
" El único camino posible es la fusión entre máquinas y hombres” Elon Musk
El empleo del futuro: sectores que lideraron la contratación de personal
Entre los nuevos sectores, los expertos en RRHH han señalado 4 como los de mayor proyección de futuro, estos son:
1. El sector tecnológico y de I+D+i como ya lo he mencionado. Se considera el área que más empleo genera en los próximos 7 a 10 años, tal y como apunta el 92,5% de los expertos consultados. Pasa por la generación de conocimientos científicos, tecnológicos e innovadores y de tener un liderazgo empresarial en I+D+i. Este gran reto estará ligado a la transformación digital, a la rentabilidad del sector y a la creación de startups.
La tecnología y la inversión en desarrollo e innovación propiciarán la creación de nuevas oportunidades de empleo, especialmente aquellas vinculadas a la biotecnología, el e-commerce y a las TIC (Tecnologías de la información y la comunicación).
2. El turismo y el ocio se consideran sectores claves desde hace años, pero tendrán un crecimiento mayor en los próximos años. Los expertos en esta materia consideran que será el que genere el mayor número de empleos, principalmente por la necesidad de mejora en transportes y la creciente demanda de ocio por parte de la sociedad.
Aunque se trate de un sector ya consolidado, también sufrirá su transformación, tales como hacer frente al empleo estacional, la adaptación de las empresas a nuevas tecnologías o el mayor ingreso por cada turista que generará mayor tiempo de ocio de calidad.
3. En salud y bienestar también serán protagonistas en el futuro del mercado laboral. Donde se considera un avance acorde al envejecimiento de la población y al incremento de la demanda de mejora de la calidad de vida por parte de la sociedad. En este sentido serán decisivos los hábitos de consumo y la preocupación por calidad de vida. Todas estas generan puestos de trabajo orientados a los cuidados paliativos, a la tercera edad, a la nutrición y el deporte, a la atención psicológica, la industria farmacéutica y la salud pública.
4. La energía se convertirá en un pilar fundamental en la próxima década en la región, a través de las energías alternativas, como las renovables, las cuales favorecerán la creación de nuevos empleos. Donde el sector tiene retos como: la sostenibilidad ambiental del sistema eléctrico, la reducción de su impacto social y medioambiental, y la gestión y certificación del sistema energético de los próximos 25 años.
Otro de los sectores que seguirán al frente de la creación de empleo, aunque en menor proporción serán la industria y manufactura con el reto de integrar la tecnología en este sector, ofrecer mayor competitividad en precios y crear nuevos puestos de trabajo.
Por el contrario habrán sectores que encontrará mayor dificultades para crear empleo en los próximos años, y que coinciden con los más tradicionales y los más afectados por la crisis económica, tales como: el comercio y la agricultura, la construcción y la banca, por otro. Todos estos sectores deberán reinventarse para poder seguir teniendo un peso específico dentro de la industria.
Habilidades y perfiles de los trabajadores del futuro
Para los expertos en RRHH consultados por Adecco, ya existe un déficit de profesionales de perfil digital que podría ampliarse a futuro. Es más, para ellos, los perfiles profesionales más relevantes en el futuro estarán relacionados con puestos de trabajo ya existentes asociados a la tecnología, a las ventas y al trato con personas.
Los de mayor crecimiento son los perfiles tecnológicos o digitales cualificados, motivados por el gran peso que tendrá el sector en los siguientes 7-10 años. Entre ellos destacarán los analistas de big data, los orientados a resolver problemas complejos en el campo de la ingeniería, los especialistas en redes sociales o los híbridos entre diseño y tecnología, incluso perfiles como los youtubers.
También ganarán relevancia los perfiles relacionados con el trato con personas, como es el caso de los coaches, los facilitadores de empresas, los gestores de nuevas formas de trabajo o los psicólogos. En último lugar, los perfiles especializados en ventas o marketing, con mayor hincapié en los especialistas cualificados en desarrollo de negocio y vendedores técnicos.
Los expertos en recursos humanos creen que las cualidades que deberán reunir los trabajadores en 2025 estarán enfocadas a habilidades transversales que compartan todos los perfiles, independientemente de rangos, especificidades o formación concreta.
Las principales que destacan son las habilidades de colaboración, que incluyen el trabajo en equipo y la capacidad de trabajar de manera remota (no sólo centrada en el teletrabajo sino en la gestión de tareas o proyectos). También valoran las habilidades para gestión el cambio, que engloban desde la polivalencia y el aprendizaje constante al intraemprendimiento e innovación. Las habilidades técnicas y de orientación a resultados y las habilidades interpersonales, como la capacidad comunicativa de los trabajadores y el liderazgo, que ya están siendo demandadas, adquirirán mayor importancia aún.
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